Mascarilla de sábila para la cara

La sábila o mejor conocida como Áloe Vera, es una planta muy utilizada para diversos tratamientos de la piel, con ella podemos limpiar la piel, hidratarla, regenerarla, eliminar bacterias e incluso se utiliza también para rejuvenecer la piel.

El áloe vera es indicado para todo tipo de piel y se recomienda para casos de piel muy seca, maltratada por el sol, madura o con apariencia cansada. Utilizarla regenera los tejidos dañados, estimula el fortalecimiento de las fibras de colágeno y elastina y por si esto fuera poco reduce el proceso de envejecimiento de la piel, reduciendo las arrugas y evitando la aparición de las molestas líneas de expresión.

La sábila posee una sustancia llamada lignina, un poderoso hidratador que penetra las capas más profundas de la piel, ayudando de esta manera a nutrirla para que luzca hidratada y suave. También es considerada como un poderoso rejuvenecedor gracias a su efectividad al producir fibras de colágeno puro, reduciendo en gran medida las arrugas existentes.

A continuación te recomendamos una mascarilla de sábila para la cara que puedes utilizar con la finalidad de obtener todos los beneficios de esta maravillosa planta.

Si deseas humectar tu cara, así como prevenir o disminuir arrugas.

Corta una penca de sábila y rebana la penca por los laterales para quitarle las espinas, introduce la planta en un vaso con agua, para eliminar el yodo. Cuando vayas a utilizar la mascarilla lo más recomendable es rebanar una de las caras de la sábila y aplicar la pulpa sobre toda la piel de tu rostro y cuello. Deja que la mascarilla surta efecto durante la noche y al siguiente día retira lavando tu rostro como de costumbre.

Si deseas reducir ojeras y ojos hinchados.

Unta un poco de la pulpa de la sábila en el área afectada, asegurándote que no entre en los ojos, encima coloca unas rebanadas de pepino y deja la mascarilla actuar durante 30 minutos o 1 hora.

Si deseas tratar el acné.

Corta una penca de sábila y extrae su pulpa en un recipiente de vidrio, agrega una cucharada de miel de abeja y mezcla los ingredientes, una vez mezclados tapa el recipiente y mételo al congelador del refrigerador al menos 3 horas. Se recomienda aplicar la mascarilla en toda la cara y dejarla actuar durante toda la noche, al día siguiente lavar como de costumbre.